PLEGARIA

  • Escrito por: Socia, Ines Valenzuela.

Poema

Recitado por la propia autora

Es extraño no abrazarse
en el saludo cordial,
el que hacíamos con cariño
y con sincera amistad,
es extraño estar tan cerca
y no poderse tocar.

Hoy el mundo ha cambiado,
para bien o para mal,
pues el hombre está enfrentado
a una lucha mortal,
que no tiene ya fronteras
ni clemencia, ni piedad.

Han venido a nuestras mentes,
todo tipo de plegarias
y nos hemos dado cuenta
que la Tierra está infectada,
que ya casi no respira
porque ha sido maltratada. 

Cuánta falta nos han hecho
los amigos, la familia
en un mar de sentimientos
la conciencia se ilumina
para abrir nuestros sentidos
y cambiar así nuestras vidas.

Pero hay ojos que no ven,
que no han podido observar,
que la Tierra nos suplica
con vehemencia y humildad,
que aprendamos a cuidarla
y a cuidar la humanidad.

Hoy estamos en peligro
sin saber que pasará
el mundo ha detenido
esa marcha sin final,
pero hay gente que no escucha
y está haciendo mucho mal.

Como quisiera Señor,
encontrar sabias palabras
para poder al fin decir
todo esto que nos pasa,
que despierten de una vez
y se queden en sus casas.

Les pediría abrir sus mentes
y también su corazón
pensar también en otros
para que no sufran el mal,
que está atacando la Tierra
con este virus mortal.

Sólo tú Señor lo sabes,
el porqué de este designio
solo tú Señor lo sabes,
si es este nuestro sino
por dejar de ver tu rostro
en el humilde peregrino.

O será que no supimos
cuidar tu paraíso
y lo fuimos destruyendo
sin valorar tu legado
con desprecio, con soberbia,
con vanidad y egoísmo.

O tal vez ya te has cansado
de ver tanta injusticia,
de ver tanta indolencia
como miramos al prójimo
con total indiferencia.

Y aquí estoy,
en el ocaso de mi vida,
Con mi cara caída
Con mis rodillas dobladas
Con toda devoción,
Sin esperar ya más nada.

A ti me entrego Señor,
en esta humilde plegaria
con todo mi sentimiento,
pues confieso que he vivido
en todo lo que he podido
cuidando tus mandamientos.

Esta era ya se acaba
Sin disparar un cañón
Sintiendo en mi corazón
Una pena tan profunda
Que me llevaré a la tumba
Quizás sin ninguna flor.

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *

Translate »
Skip to content