PLAZA MAYOR DE PINTO

• Escrito por: Socio, Fernando Arriagada Cortés.

Crónica

Así acostumbraba llamarla el fallecido alcalde Fernando Chávez, siendo uno de los elementos más característicos del paisaje urbano pinteño y para distinguirla de las otras dos plazas comunales (la de Los Lleuques y la del Bicentenario). La plaza mayor es la más conocida de todas, es el eje del centro pinteño y a su alrededor se articulan las principales instituciones comunales de servicios públicos como municipalidad, iglesia parroquial, tesorería, registro civil, biblioteca y casas comerciales.

Nuestra plaza se caracteriza por ser amplia, ocupar una “manzana” completa de 15.625 metros cuadrados, tener variados árboles, algunos frondosos, añosos y nativos como araucarias, peumos, ulmos, avellanos, mañíos, notros, etc. Otros son foráneos como el legendario alcornoque, abedul, cedro del Líbano, enebro, mahonía y numerosos tilos, conformando un conjunto valioso que al paso de las estaciones van cambiando en su fisonomía y color. En la actualidad se encuentra finalizando su proceso de remodelación que todos esperamos verla renovada y con muchos nuevos elementos que se integrarán a su paisaje, haciendo de ella, una hermosa postal de identidad para quienes nos visitan y para deleite de la comunidad.

Diseñada junto a la fundación de nuestro pueblo, después de un fallido intento de cubrirla de álamos, algunos antiguos alcaldes se preocuparon de su embellecimiento, como Francisco Javier García o Pedro Arriagada. Allá por los años treinta, la plaza contó con una laguna y después con un hermoso caracol de enredaderas que conducía a un pequeño mirador, muy concurrido por los niños y las familias del ayer. También hasta mediados de los años sesenta, tenía una pequeña pecera y su kiosko, que data de los años cuarenta, todavía sobrevive remodelado. Para el centenario pinteño de 1960, se inauguró un muro de piedra en su centro, en donde se colocó una plancha metálica que recordaba el hecho. También ahí se efectuaban las actividades cívicas dieciocheras, con la presencia de los grupos scouts que en esos años contaba la comuna y los pequeños lobatos que tenían una forma muy original de desfilar.  A principios de los años ochenta se instaló un busto con la imagen del Libertador O’Higgins en frente de la municipalidad, con tres mástiles que se usan para izar las banderas que ha tenido nuestro país desde su independencia. Con posteriores mejoras, solo ahora se ha hecho una intervención integral de esta, la que muchos esperamos sea más definitiva. Una plaza acorde a nuestros tiempos en donde el mundo vegetal conviva en grata armonía con las imágenes en metal y madera que la adornarán, junto a los espacios para actividades deportivas, asientos para el descanso y paseos por sus calles y senderos interiores.

Invitamos a toda la comunidad a respetar y cuidar este bien público que a todos nos pertenece, como por ejemplo, echar la basura a donde corresponde. La plaza bien puede tener múltiples usos como paseo, descanso, ejercicios físicos, observación y conocimiento de nuestra flora y fauna nativa, lugar de encuentro y recreación con espectáculos artísticos, uso pedagógico para niños y jóvenes, etc.